https://www.youtube.com/watch?v=V-tyY5gah-c&feature=youtu.be
POETAS ARGENTINOS: ENTREVISTA CLAUDIA AINCHIL. PRODUCCIÓN CAMILA SUNICO. OPERACIÓN TÉCNICA: BCNRADIO. LOS MARTES DE 20 A 21 HS. POR LA RADIO DE LA BIBLIOTECA DEL CONGRESO DE LA NACIÓN http://bcnradio.com.ar/
MARY GUERREIRO (BUENOS AIRES)
POR DONDE LAS NUBES
Cornisa cubierta de guijarros.
Imposible andarla,
sin el ruido de la pisada
Me convence y no vuelo,
pero parece.
Una cortina de álamos y nidos
Oculta el precipicio
y me salva.
En el otro lado del sendero,
la montaña,
donde apoyo el cansancio,
la escucha del silencio
y el vértigo.
CONTROVERSIA
Silencio
de mi pensamiento.
No te nombro.
te niego,
con el propósito de no amarte.
Apenas evoco tu mirada
para hacerte presencia
en lo rojo
que navega mis venas.
LA OTRA
Está
aquí.
Es la que escribe.
La otra,
la que taladra el papel
se pierde en el agujero.
Esa, esa que te digo
siempre encuentra,
aún en el abismo,
una gota de tinta
y le
apaga la sed
a un ruiseñor.
"Se ha helado el reloj de la torre,
las agujas dejan caer un granizo
de
minutos”
( Leopoldo Marechal)
En aquella
estación de tren
desierta
transcurría la tarde.
De pronto te vi,
caminabas pasos anchos
sobre el puente peatonal.
Te vi.
Bajabas
por las escaleras rápido.
Desde lejos te vi.
Avanzabas
hacia el abrazo.
Avanzábamos
hacia el abrazo.
Al unísono como una campanada: _ Por fin…
Se congeló el tiempo.
Las agujas goteaban
la eternidad.
Nunca nos
movimos.
Aún estamos allí, estatuas
invisibles,
a la
espera
de que el reloj de la torre
nos deshiele.
LOS TILOS
Mi conciudadano albañil
no puede olvidar la tala
de árboles de su calle.
Vasko Popa
Serpientes sedientas de fuego
hunden su ímpetu en busca del centro de la tierra.
Circulan en las entrañas de los troncos
un congreso de venas que deciden
el color
la forma
y el perfume de las flores.
Nubes blancas con pistilos cuelgan de mariposas.
Primaverean el aire.
Arraigan en el cielo.
Se cuelgan del azul, mecen la brisa.
Asombran la vereda,
vecinos omnipresentes que
uno, ni saluda.
El aroma entra por las ventanas.
Okupas de la calle
desapercibidos,
albergan inquilinos en los nidos.
Te entiendo, albañil oprimido.
Los tuyos también eran sólo eso:
árboles,
okupas de la calle,
desapercibidos.
Hoy te atormentan los recuerdos.
Perdiste quién sabe cuántos amores
y tu dolor
en los árboles caídos.
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