jueves, 12 de septiembre de 2019

ENTREVISTA A LA POETA ADRIANA SERLIK (BUENOS AIRES / ESPAÑA)

ESCUCHA EL AUDIO:
https://www.youtube.com/watch?v=va8Q5sVuhHc&feature=youtu.be


POETAS ARGENTINOS - ENTREVISTA: CLAUDIA AINCHIL. PRODUCCIÓN CAMILA SUNICO. OPERACIÓN TÉCNICA: BCN RADIO. LOS MIÉRCOLES DE 20 A 21 HS. POR LA RADIO DE LA BIBLIOTECA DEL CONGRESO DE LA NACIÓN


ADRIANA SERLIK (BUENOS AIRES / ESPAÑA)

  De “El ojo cósmico”. Gandía, 2019 .Se presentará el 13 de diciembre de 2019 en el Palau Ducal dels Borja de Gandía. Libro publicado a beneficio de la Asociación Española de lucha contra el cáncer.

XIII
Bailo,
el perfume del azahar
se une a mi danza
La tisana
me hace olvidar
que no tengo
ni un pelo
en la cabeza.
Bailo,
desafío
y bajo corriendo
la escalera.
Me siento
pluma,
cisne,
fatal...
Escribo.
Sagasta
pregunta
si la tisana estaba
demasiado fuerte.
Danzo por las calles
de Simat
sin pelo,
sin vomitar,
leve
y no sé
por cuánto tiempo.

De Corolario. Gandía, 2018.

VI
Reconocí
el ruido del trueno
y lo uní,
inexplicablemente,
al goool
oído
en mi niñez,
un sábado o domingo,
en mi casa
de Avellaneda.
(Racing o Independiente).
Gol de la vida,
para seguir riendo
o escribiendo. 

De Dones de foc/dones de a'igua. Gandía, 2017

2.-

Un tiempo perdido,
que nos inventamos
creyendo
que pertenecíamos
a la misma dimensión,
cuando seguimos
siendo
del grupo
de los otros.
Los llegados,
no nacidos
con perfume
de azahares.
Y me dolió,
duele
pero he decidido
morir entre azahares
y ni siquiera
las diferencias
me harán cambiar
de idea.


De 26 poemas. Gandía, 2016.

VI

Me fui
con un cenicero
en la bolsa,
libros,
cartones coloridos,
cinco ropas
y entré,
trampeando
a todos,
en este destino
de gitana.
Sillas
de distintos respaldos,
Camas blandas,
duras,
semiblandas.
Pisos rojos,
vinílico,
mosaico.
Y una violeta
en una ventana
recortándose
en un cielo
londinense.
Buscando un puente
mientras la lluvia
deshacía la foto
de una columna
de Toledo
en el zapato roto.
Mi cara
mojada
con lágrimas
de preguntas
sin respuesta.
Recuerdo la llegada
el tañido,
en una larga tarde
esperando
la voz
y los abrazos.
Luego
desandando
por las calles
de Sacro Fano
con un único farol
y las piedras
desgastadas
por las pezuñas.

He dejado lastre
fuera.
Está en las noches
quitadas
al sueño,
en la desesperación
al dar valor
a las palabras,
en los cuentos
de Poroto
en Londres,
con las tazas de té
y Freddy,
el grito
en mi boca cerrada.
Mi luna
por eso
me dura
miles
de horas,
segundos
y semanas. 

De Frágil, Gandía, 2014.

XXV

MAESTRA REPUBLICANA

Untados de tinta,
los dedos fervorosos
quedaron quietos
cuando entraron
en la escuela.
Los ojos cariñosos,
la mirada inteligente,
los pies bailarines,
quedaron quietos
cuando invadieron
la escuela.
Solo era
una joven maestra
en un pequeño pueblo
en medio
de un monte.
Y cuando
no quiso
levantar el brazo
su destino
quedó detenido
a esa hora
de la tarde.
Algunos dicen
que se le oyó,
antes de caer,
gritar
¡Viva la educación y la cultura!
Otros
solo miraron
a otra parte.

De Ara puc alenar . Madrid, 2011

XIV

No pude escoger
no alcanzó el tiempo,
ni siquiera la penumbra
de un día desgarrado.
Porque tenía un mar
de caricias
guardadas sabiamente.
No fueras a reírte
de este trozo oculto de mi ser.
No quise resquebrajar
las palabras dichas al azar,
el bostezo inane,
la magia de ese copo que caía.
No fueras a reírte
de mis sentimientos allí agolpados.
No me permití decir razones
y los trucajes
ocuparon
el centro del universo
mal avenido e inquieto.
No me desdije
de mi postura inicial.
no fueras a reírte
de las acciones pueriles
y dejé que todo siguiera
onírico y viviente
en un segundo
de la tarde.

De Andaremos, amor andaremos. Pontevedra, 2005

XIX
Andaremos

Andaremos, amor
andaremos.
Tú, desde la penumbra guiándome suavemente.
Yo, algo desmembrada
empujando este dolor que sigue ahora,
silenciosa por los cuartos vacíos
cocinera ya de sólo un plato.
Leyendo las noticias y escuchando tu respuesta
oyendo la música e imaginando tus oídos,
andando por la calle
y sintiendo en mi palma tu mano acariciante.
Pero andaremos amor
andaremos.
Todavía me cuesta dejar de extender mi mano
sobre tu hueco en la cama.
Me cuesta ignorar el doble,
ignorar la cantidad
ignorar tus comentarios
sobre la máquina mágica o maldita.
Pero es con ella que puedo ahora
depositar este peso,
esta descarga que me deja respirar
sin dolerme tanto el pecho.
Me dicen que me durará mucho,
me cuentan otras experiencias,
me dan el pésame por las esquinas
vecinas y vecinos que no conozco.
Andaremos, amor
andaremos.
Prometido estuvo desde un principio
porque era ley de vida irnos
pero de este dolor
por qué nunca hablamos.







lunes, 9 de septiembre de 2019

ENTREVISTA AL POETA DANIEL ARIAS (BUENOS AIRES)

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https://www.youtube.com/watch?v=-720KI5s2l4


POETAS ARGENTINOS - ENTREVISTA: CLAUDIA AINCHIL. PRODUCCIÓN CAMILA SUNICO. OPERACIÓN TÉCNICA: BCN RADIO. LOS MIÉRCOLES DE 20 A 21 HS. POR LA RADIO DE LA BIBLIOTECA DEL CONGRESO DE LA NACIÓN

DANIEL ARIAS (BUENOS AIRES)


Cuando todo quede sin nombre
y lo oscuro despida la memoria
que mis manos tengan la forma del viento,
que fluya en la savia del pino,
acaso suba por el humo de la mañana
como dedos de aire.
22 – 9 - 11


En mi principio esta mi fin, dijo Eliot,
era verdad.
Hubo un tiempo que fue futuro,
que fue pasado,
giros confusos en luces,
días de belleza, tiempos de brillos
y sombras que no permanecieron,
lugares aletargados que fueron movimiento,
floraciones, intentos y diamantes,
viento cargado de rostros,
hojas secas arrastradas por calles de suburbio,
viento vacío de toda regla,
abstenciones, distancia,
caída en soledad al no mundo,
al espacio de las privaciones,
vacío imaginario entre dos paredes altas,
hombres y hojas sin tiempo pasado
entrando en el trapecio del futuro,
pasado y futuro son puerta de las decepciones
con su tejido de palabras
que abren sus callejones sin sentido.
Allá donde se reclina el sollozo,
el agua sigue de los ojos la tenue pendiente,
sigue lentamente en silencio,
en oscuro silencio,
cayendo….

3 – 12 - 02


Escucho decir, todas las cosas son mías,
el viento, las rocas, las ramas son mías,
aquel impulso, este borde, esa mano son míos,
no importa como ni cuanto pero  todo lo que siento es mío,
dicen mío a todas las cosas.

No se que es mío todo siento extraño y me golpea la certeza de lo ajeno
lo inasible, lo incomprendido, lo lejano y aquello que deseo con ese ardor
largamente amado, aquello tan fuera del alma un tres de febrero
tan lejano en el cielo y tan secreto como eterno
aquello que asoma en las plegarias como un huésped en las noches
en las que he cavado en la oscuridad con desesperación,
no es mío.

Mio es el camino, la desilusión, el peregrinaje y la duda,
mis manos que se despliegan lentamente al espacio cotidiano
hacia el corazón, tu corazón, que llegó como la lluvia.
3 – 4 - 12

  
Dolor, tu espacio es demasiado grande,
voy a entrar en tu casa como un ejército,
inadvertido.
De tu mano infinita como aves marinas
que vuelan hacia el mar,
la palabra,
larga en sombras decide quedarse.
Mi pequeño átomo trepa la corriente
y no ve la llave que abre tus caminos,
la mentira nos viste
con una rondita de hojas,
y disuelve la tarde.
                                                                         15 – 7 - 02
La tortura sobre los cuerpos
zigzaguea con su dedo amarillo
luego, señala un cielo de tierra
sigue ondulando en el humo de las cosas
después, señala una encrucijada,
una estrella enferma y una patria vieja,
esos nombres se han perdido
como amantes que se despiden
para siempre.
16 – 10 - 09
Las iglesias son cuatro muros de piedra
que alzan cenicientas sus torres al cielo
allì perdemos los ojos anémicos
y alimentamos pájaros con la mirada.
En las iglesias hay sombras largas
como un atributo glorificado
que nos habla en voz alta del dogma,
oprimen la culpa del mundo al dolor de los santos
y la muerte visita con su traje blanco
la antigua noche de la espada
su luna oculta.
Las iglesias cantan sobre piedras negras
viajan por las raíces del hombre
hasta la puerta del sol
única puerta donde entra luz
y nos deja sin memoria, ciegos
todos buscan un árbol silencioso de verde justicia
pero solo hay un camino largo
para los que tienen sed y sueño y hambre
acorralados por el mar encrespado de la vida
por sus casas quemadas y sus hijos
agujereados en el fondo de sus ojos,
todos pasan y se convierten en piedras,
un rio seco que espera
la campana de la resurrección.
23 – 8 - 13


Un niño silencioso penetró tus ojos y el sol estaba alto
un aroma transparente cubría la casa
de sueños interminables y manos en el pasado y el futuro,
demasiado tiempo en el agua de tus ojos el pulmón de la noche
exceso de miradas como primavera en los tiempos del ruiseñor

¿Dónde estaba la gente cuando el sol devastaba las veredas?

¿Dónde estaba la ciudad con su carro de vida hablando a los insectos?

Un niño luminoso bebe pensamientos bajo un cielo ardido
aquí no hay ecos,
todos sonreímos en el borde de la huida como en otro tiempo,
cantamos entusiasmados entre sueños mientras duelen las heridas,
ella lleva el peso del otoño encima de los ojos.
7 – 10 - 11

ENTREVISTA A IVAN CAMAÑO (SANTIAGO DEL ESTERO)

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https://www.youtube.com/watch?v=yJYYexSJEl0


POETAS ARGENTINOS - ENTREVISTA: CLAUDIA AINCHIL. PRODUCCIÓN CAMILA SUNICO. OPERACIÓN TÉCNICA: BCN RADIO. LOS MIÉRCOLES DE 20 A 21 HS. POR LA RADIO DE LA BIBLIOTECA DEL CONGRESO DE LA NACIÓN http://bcnradio.com.ar/


viernes, 6 de septiembre de 2019

ENTREVISTA A LA POETA LUCIANA ANDREA MELLADO (BS AS / CHUBUT)

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POETAS ARGENTINOS - ENTREVISTA: CLAUDIA AINCHIL. PRODUCCIÓN CAMILA SUNICO. OPERACIÓN TÉCNICA: BCN RADIO. LOS MIÉRCOLES DE 20 A 21 HS. POR LA RADIO DE LA BIBLIOTECA DEL CONGRESO DE LA NACIÓN
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LUCIANA ANDREA MELLADO (BS AS / CHUBUT)

Sangre

La niña sangra y en hembra la transforman
y el juego se suspende sin pausa y sin aviso.
Despiertan sed sus nuevas humedades
y la arena es barro en sus manos aún torpes.

Los perros domésticos hociquean su sexo
intolerantes al disimulo de una sangre
que cambiará de color en cada parto.

Los ojos de la niña se espesaron
ya no ve ramos de transparencias en el aire. 


De Las niñas del espejo. Buenos Aires. Botella al Mar, 2006.
3
VII

¿Ve aquel mundo de al lado
que huele a tomillo y laurel?

Lo ve. Mírelo.

Usted también.

¿Ve a la mujer de trenza larga
como hondura de cielo?

¿La ve?

Está sentada en un banquito
torciéndose las manos
con lanas y con hilos.

¿Y a la mujer callada
que curte cueros
para hacer quillangos?

¿La ve?

De zorro son, sí,
y de caracul.

¿Y a la niña muerta
con ojos de eclipse?

¿La ve?

Es tan bella y pequeña
como una mariposa azul.

¿Y aquella calle que atraviesa
la puerta, la ve?

Por esa calle se fue mi hija,
la mayor.                                                       


XIII

La vida trastumbada la suspiro entre palomas
que florecen en la infancia
cuando el palomar era en el patio
sobre el galpón de chapa
un agujero y un hombre
que no vuelve todavía
de la muerte.

Después
la hospitalidad me abrió las piernas
y dejé pasar a peregrinos,
viajeros, indigentes y fugados
que dejaron la puerta de mi casa
llena de cadáveres.

De Aquí no vive nadie. Buenos Aires: El Suri Porfiado, 2010.

II

Los piratas son niños
que huyen de las sombras
cuando el silencio seca
los resguardos
del agua.

A veces los espanta
un pájaro pequeño,
el aire que le aúlla
a ciertas superficies.

La marea en sus ojos
no se repite nunca
aunque insista en lo oscuro
el humo de la noche.

Brotan de la memoria
del naufragio
como la hierba débil 
que crece
en los incendios.
 
De El agua que tiembla. Buenos Aires. Del Dock, 2012.


lengua afuera de la perra adentro

tu aliento, creación de madera 
busca pocos alimentos

esa trampa nunca te hará libre
por más que insistas en belleza

tu hambre viene de lejos
de otro frío
de otra noche

¿podrías jurar que sentís tristeza?
¿alegría?

ahora mismo podés ser la perra afuera
no metafóricamente
la perra afuera

el universo te cabe en una mano
plegado como un origami puede pasar
debajo de todas las puertas

¿estás triste todavía?
¿estás adolorida?

son los ovarios
la sangre que hablan
pero no duelen los ovarios
dicen
y si no duelen
no existen

podés ser la perra ahora mismo 
afuera

escuchar el frío podés
escuchar los ojos que miran con otra lengua
otras leyes y sanciones

¿Kafka se lavaría las manos
con jabón blanco?

la higiene es importante

pero el goce no aprecia la limpieza
y sus fríos

la limpieza amansa el cuerpo real
porque le teme

hay que lavar las impudicias
la sangre que no se note
la sangre que no se note

y esos perros olfateando
la entrepierna
siempre
animales

la sangre se escapa porque la perra
es cachorra todavía
no la necesita

la perra está adentro

con un cuerpo dicho
desmejorado
sangra

el juego de la belleza
no tiene apuro

una palabra para decir quiénes somos
no es posible
porque una lengua no se tiene
porque un cuerpo no se tiene

lo que se tiene son cosas
y solo las cosas pueden ser dichas 

la sangre es un aliento rojo
que está afuera y adentro
y no sabe
no espera
no explica
no necesita nada
no está pensando en el cumpleaños de su madre
doliéndose los ovarios

esto es una silla
esto es una letra
esto es un suspiro entre tanta asfixia
legislativa y policial

serás feliz
serás algo
serás alguien
serás normal
serás mujer
bandera

serás el patio de un colegio

y amarilleando crece en la memoria
la noche orinada en un ladrillo
por qué mamá mis riñones no andan
tu padre
el cuerpo de tu padre y de sus padres 
y sus padres y padres
vienen con mal riñón

vengo de ese riñón y el tiempo sigue picoteando

tengo miedo mamá
el ladrillo está caliente
y la noche fría

afuera la perra que soy está callada
y adentro
ladra
ladra
ladra

El hueco en el que todo cae

No me preguntes el nombre de los días
no lo recuerdo
no puedo recordarlo.

La poeta como carpintera o suicida
guarda herramientas
para una misma falta.

¿Quién descansa en tu boca?

¿En el plato vacío de tu boca?

Hay niños escritos en todos tus labios,
necesidades, juegos y tus ojos,
el hueco en el que todo cae.

La radio suena y los vecinos hablan
en voz alta de pronto.

Suben la música, una melodía
zumbadora traspasa la pared
que nos separa.

Es inevitable escuchar.

Tu oído no se apaga nunca.

Tu oído es el arma que gatilla
hacia adentro.


De Animales pequeños. Buenos Aires: La Carta de Oliver, 2014.